En un comunicado, se informó que, de ellos, cinco ejemplares se recuperaron vivos y uno muerto. Los flamencos presentan deshidratación y alas cortadas.
La Profepa inició procedimiento administrativo, iniciando el aseguramiento precautorio de las cajas y los seis ejemplares.
Finalmente, los flamencos fueron trasladados al Parque Zoológico del Centenario, en Mérida.