En su conferencia magistral, Glantz recordó que gran parte de la obra de Woolf deja ver los problemas que a lo largo de los años han enfrentado las mujeres, como habérseles negado el derecho a la educación o a un trabajo.
En presencia de Sara Poot Herrera, Margo Glantz refirió que “muchos de los problemas que Woolf planteó siguen sin resolverse, no solo en la escritura, sino en la realidad. Hace muchos años, en el siglo XIX ninguna mujer habría podido asistir a los colegios que se fundaron, no se reconocía la necesidad de que las mujeres recibieran una educación formal universitaria, cosa que ya sucede ahora”.
Aunado a esto, resaltó que entre otros problemas que faltan por resolverse está la violencia de género, el rechazo a la transexualidad y la unión entre personas del mismo sexo, entre muchos otros.
Al dar un breve repaso sobre los libros y ensayos publicados por Virginia Woolf, resaltó que en cada uno de ellos la escritora británica siempre dejaba ver esa necesidad de que se reconociera que “la mujer y el hombre tenían la misma capacidad de pensar”, lo que le ha valido ser una de las autoras más leías por las feministas actuales.
Puntualizó que también abordó y abrió paso al tema de la homosexualidad y la bisexualidad, principalmente en “Orlando”, novela publicada en 1928 que calificó como “una biografía ficticia de su amante que era una mujer lesbiana que también amaba a los dos sexos enormemente”.
Antes de finalizar, Glanzt reiteró cómo a lo largo de los años Virginia Woolf dio paso a los movimientos feministas y de la comunidad LGBTTTI+, además, aseguró que su lectura es indispensable para todos aquellos que formen parte o que coincidan con estas ideologías.