Sotomayor Sanabria, quien fue invitado especial a la inauguración de la décimo quinta edición de la Copa Rogers Hall de Atletismo, del 7 al 9 de diciembre, fue la sensación para deportistas que entrenan zumba en el inmueble de la colonia Yucatán. Con 1.95 de estatura no pasó desapercibido, hasta aquellos que no lo conocían deseaban tomarse una foto con él.
Vestido con una playera roja con el logotipo Rogers y con la bandera de Cuba, el antillano fue recibido por el titular del Instituto del Deporte del Estado de Yucatán (IDEY), Carlos Sáenz Castillo, acompañado de Jorge Esteban Abud, director de Enlace y Vinculación de la dependencia estatal y Jesús Molina Torres, administrador del inmueble.
El medallista olímpico llegó puntual a la cita, acompañado de Normando Rivas Cantillo, coordinador deportivo del Colegio Peninsular Rogers, tras saludar y tomarse fotos con personas que asisten cotidianamente al estadio, se dirigió a la pista de tartán donde saludó a los jóvenes del Club Titanes, quienes realizaron un entrenamiento.
Posteriormente, acudió a observar a otro grupo y mostró algunas técnicas para hacer más puro el salto de altura y algunos movimientos para hacerlo mejor.
Sáenz Castillo calificó este viernes como de fiesta por la presencia del plusmarquista y agradeció al Colegio Rogers y a Normando Rivas por traer a este gran atleta a la Copa Rogers, con miras a la Olimpiada Nacional 2019.
El funcionario estatal señaló que ya platicó con Ana Gabriela Guevara, actual titular de Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), con la intención de rehabilitar y darles mantenimiento a las unidades deportivas que dependen del IDEY.
Durante su intervención, Sotomayor dijo que en Mérida se siente como en casa, y comentó que no es la primera vez que viene a la capital yucateca.
“Quiero felicitarlos por lo que hacen, sigan entrenando y sean disciplinados, eso los llevará muy lejos”, dijo a los chicos del club y añadió que para llegar más lejos se necesita entrega y mucha voluntad.
El ahora secretario general de la Federación Cubana de Atletismo, dijo también que no todos los sueños son posibles. “Yo soñé saltar 2.50 metros, no se pudo, pero hay que ser ambiciosos”.
Les reiteró que soñar debe ser el objetivo de todo atleta, pero para ello hay que entrenar fuerte, ya que solo de esa manera se puede lograr los resultados.
