Efectivos del Onceavo Batallón de Infantería, de la X Región Militar, son quienes entran en acción antes, durante y después del embate de un meteoro, con el objetivo de salvaguardar a la población de una o varias comunidades que pudieran quedar afectadas.
“Contamos con una fuerza de reacción permanente que está alerta en esta temporada de huracanes, comprendida del primero de junio al 30 de noviembre", señaló Luis Enrique Beltrán, subteniente.
Desde 1966, el plan DN-III-E vio la luz para aplicar los esfuerzos del Ejército en acciones de atención y auxilio de la población afectada por los embates de la naturaleza, labor que los efectivos realizan de manera excepcional, como ha quedado demostrado en la reciente afectación del sistema tropical "Grace", el cual causó varias afectaciones en Yucatán.
En un acto realizado en las instalaciones de este mando militar, se informó que se cuenta con vehículos, maquinaria y personal de auxilio y comunicación, lo que permite garantizar la ayuda a la población más vulnerable.
"El personal se mantiene constantemente instalado en escenarios realistas para qué, cómo y cuándo poder actuar. Es el amor al país, a la gente y nosotros lo realizamos con orgullo y con todo nuestro esfuerzo para atender todas las necesidades de la población porque nosotros también somos parte de la población", apuntó.
Parte fundamental de la acción del plan DN-III-E es la coordinación entre las fuerzas armadas y las autoridades civiles, como Protección Civil, con el fin de unificar tareas que permitan garantizar un apoyo óptimo en caso de un desastre natural. (ACOM)
