Sin embargo, las autoridades federales, mediante la delegación de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) aseguraron que los reportes que tienen establecen que se cumplió la meta de las mil 200 toneladas.
En entrevista, Beltrán Gómez, quien es uno de los siete exportadores de pepino de mar que existen en Yucatán, señaló que de manera sorpresiva, las autoridades federales abrieron el periodo de pesca de la especie marina, lo que generó que muchos de los hombres de mar no estuvieran preparados para la captura.
Recordó que la temporada de captura inició el siete del presente mes y concluyó apenas el pasado sábado, sin embargo, calculó que ni el 25 por ciento de la producción total que se esperaba en la costa yucateca se logró capturar.
“Todo se debió a la autorización tan repentina, nadie estaba preparado, la dan un fin de semana al pescador, nadie tiene el dinero para trabajar, el tiempo estuvo fatal. Parece que escogen las temporadas con mal tiempo, el producto sigue ahí, pero con el clima no se puede trabajar”, expresó.
Indicó que en lo particular trabaja con la cooperativa “Manuel Cepeda Peraza” del municipio costero de Río Lagartos, con quien se tenía la expectativa de captura de 58 toneladas, sin embargo, sólo se lograron 15 toneladas.
Expuso que la poca captura de la especie marina disparó los precios al grado que un kilo del equinodermo ya sancochado se vendió por parte de los pescadores y permisionarios hasta en 650 pesos el kilo.
Comentó que en el mercado internacional, el kilo de pepino de mar se llega a cotizar hasta en mil 200 pesos, sin embargo, tras la finalización de la presente temporada, se prevé que podría incrementarse de manera importante.
Finalmente, preciso que de manera legal, un número no mayor de siete exportadores compran el producto que es enviado principalmente a los Estados Unidos, Canadá y al mercado asiático, principalmente a China.
UNA BENDICIÓN
Tras afirmar que el pepino de mar es una bendición para los hombres de mar de la costa yucateca, el delegado de la Sagarpa en la entidad, Luis Ernesto Martínez Ordaz, rechazó calificar de exitosa o no exitosa la “pepineada” en la costa yucateca, toda vez que ello depende de quien realice el comentario.
“Yo te aseguro que al pescador, si bien, no hubo los volúmenes de otras veces, estoy seguro que mal no les fue, aquel que salió y capturó todos los días y vino con un buen porcentaje de kilos capturados, seguramente le fue bien, porque a final de cuentas, estamos en un periodo de veda tanto de langosta como de pulpo, estamos regresando de una veda de dos meses de mero, eso sin duda fue un aliciente”, señaló.
Rechazó que en temporadas pasadas de pepino de mar o de otras especies marinas se hayan repuesto los días de pesca derivado del mal tiempo que existió en la costa yucateca, pues se tratan de decretos que son manejados por el gobierno federal en el Diario Oficial de la Federación.
Aceptó que no existe un registro de los empresarios que se dedican a la compra de la especie a los hombres de mar, toda vez que no es necesario, pues quienes lo capturan deben emitir un documento que ampare su legal procedencia, de lo contrario, es decomisado y las personas son consignadas ante la autoridad correspondiente.
Comentó que el precio de pepino ya sancochado aumenta considerablemente debido al proceso que le da un valor agregado al producto que en lancha es comprada a 80 pesos.
Consideró que no es competencia de las autoridades federales intervenir en la regulación de su precio e incluso, negó que sea necesaria la certificación de origen del producto, toda vez que se trata de una pesquería relativamente nueva.
Finalmente, hizo un llamado a no satanizar al pepino de mar y verlo como una opción importante para los pescadores del estado.
