Se trata de un documento sobre el territorio y sus zonas más vulnerables, para la toma de decisiones de las autoridades, al momento de organizar estrategias y reforzar acciones preventivas o de auxilio, con tal de salvaguardar la integridad de la población y hacer una mejor planeación del desarrollo, para contar con infraestructura más segura.
“Lo que se tenía es un Atlas de Peligro, que se ha ido actualizando en coordinación con el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) y que ya es parte de la plataforma digital de dicho centro; esto es lo que dio, precisamente: las bases para poder ahora convertirlo en un Atlas de Riesgo, como nunca antes había tenido Yucatán”, informó el titular de Procivy, Enrique Alcocer Basto.
Recordó que se ha actualizado muchas veces la versión anterior, por lo que este nuevo plan de acción no es una simple actualización, sino “una transformación completa, que será una herramienta moderna de uso cotidiano, para los análisis de riesgos que podrán ser automatizados”.
Alcocer Basto dijo que este proyecto fue clasificado por el Gobierno Federal, como de la más alta prioridad para su financiamiento, por lo que será el único Estado del país que recibirá recursos en este tema, en el Presupuesto de Egresos 2023.
“Con base en la solicitud firmada por el gobernador Mauricio Vila Dosal, en respuesta a la convocatoria emitida sobre reglas de operación preventivas, que suplió al Fondo para la Prevención de Desastres Naturales (Fopreden), Yucatán dispondrá de un fondo total por 10.4 millones de pesos, de los cuales el 80 por ciento serán recursos federales y el resto del Gobierno del Estado”, señaló.
El funcionario reiteró que el Atlas es fundamental para la prevención y la seguridad de la población, y la idea será incidir eficazmente en la mitigación de riesgos, seguir avanzando y consolidar la Protección Civil preventiva, en la que hemos trabajado.
“Asimismo, es una herramienta de consulta y de toma de decisiones transversal, pues abarca muchos ámbitos, como el uso del suelo y el ramo de la construcción, entre otros; su consulta es hecha por muchas dependencias y es fundamental para expedir, y ahora, para mejorar los análisis de riesgos que nos solicitan los particulares y que cotidianamente expedimos”, aseguró el funcionario.
Subrayó que el proyecto preventivo, que impulsó y apoyó la titular de SGG, María Fritz Sierra, fue denominado “Actualización del atlas de peligros de Yucatán, transitándolo a un atlas de riesgo con énfasis en los efectos de vientos fuertes, inundaciones pluviales y hundimientos”, y estuvo acompañado de la petición de cofinanciamiento para su ejecución, rubricada el 13 de diciembre de 2021.
Procivy fue notificada, el pasado 19 de octubre, de lo siguiente: “Los miembros del consejo y evaluación del fondo preventivo otorgan la máxima prioridad para el ejercicio de los recursos 2023 al proyecto preventivo”, indicó el servidor público, en torno de la respuesta, que tardó casi 1 año en llegar.
Un grupo de trabajo multidisciplinario del Centro Estatal de Gestión Integral de Riesgos de Desastres de Procivy respondió a los requisitos y procedimientos administrativos, que requirió para ese efecto la Coordinación Nacional de Protección Civil, de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Dicha dependencia emitió, en el Diario Oficial de la Federación, con fecha al 24 de noviembre de 2021, el acuerdo por el que se establece los lineamientos preventivos de operación ante fenómenos naturales perturbadores, por lo que se trabajó para responder a la convocatoria, puntualizó.
Alcocer Basto resaltó que la actualización del Atlas de Riesgos no será encargada a instancia ajena alguna al Gobierno del Estado y será la propia Procivy, con sus propios recursos humanos, capacitados en fenómenos naturales, con sus conocimientos y experiencias, las y los que desarrollarán el plan.
“Seremos el primer organismo de Protección Civil en realizar su Atlas con su personal, sin contratar una empresa que lo haga”, recalcó el servidor público, quien informó que la aplicación de los recursos mixtos, en un periodo de 18 meses, será a partir del próximo año.
El 5 de marzo de 2022, añadió, el Consejo de Evaluación del Fondo Preventivo analizó los proyectos que enviaron las entidades; como resultado de la revisión de cédulas administrativas y técnicas, determinó que el proyecto de Yucatán se consideraba “elegible condicionado”, y fue el 1 agosto de este año cuando el citado organismo notificó de otro acuerdo, en el que se indica que es “elegible sin condiciones”.
Dijo que el Atlas de Peligro actual es descriptivo de las características del estado y los fenómenos que lo pueden afectar, no conjuga elementos necesarios para simular el riesgo latente, principalmente vientos fuertes e inundaciones, que han sido de gran impacto en los últimos años.
Lo que propusimos a la Federación es transitarlo a uno de Riesgos, es decir, que realmente nos diga lo que puede pasar y dónde, poniendo ciertas variables, además de los trabajos para transformarlo con el propio personal; así, el recurso se destinará para comprar equipos de cómputo, programas, licencias correspondientes y los estudios necesarios.
“Desde el inicio de la administración, comenzaron las acciones para transitarlo de un libro en formato PDF que era, a un sistema informático, con el cual se realizan, entre otras cosas, los boletines y las probables afectaciones, cuando se acerca un ciclón tropical”, comentó.
“Vamos a modernizar esta actividad, al grado de poder mostrar de forma tridimensional y realizar simulaciones más precisas, para la toma de decisiones”, indicó Alcocer Basto, quien expuso la vulnerabilidad de las poblaciones yucatecas, particularmente del sur y la costa, expuestas a los efectos de vientos fuertes, inundaciones pluviales y hundimientos.
Finalmente, recordó que el territorio se localiza en una zona ciclogenética, con condiciones favorables para la formación de depresiones, tormentas tropicales y huracanes, ya que está rodeada del Océano Atlántico, Mar Caribe y el Golfo de México.