Al respecto, el titular de esta área, Miguel Ángel Soberanis Luna, explicó que como parte de las acciones de prevención, se incrementan los muestreos que se efectúan en diversos puntos de la costa yucateca, con el fin de verificar que no haya un florecimiento algar que pudiera dar paso a la formación de este fenómeno.
El funcionario estatal explicó que este es un fenómeno natural que ocurre normalmente en época veraniega, aunque refirió que por el momento ningún muestreo ha dado positivo a un posible florecimiento, por lo que todos han sido negativos.
Según especialistas, se denomina marea roja a un conglomerado de algas que en ocasiones consiguen teñir las aguas debido a los pigmentos que estos microorganismos poseen, no obstante, a estos eventos se les denomina como Floraciones Algales Nocivas (FANs), ya que muchas veces no poseen coloración a la vista de las aguas.
La causa de un sin número de factores ambientales que se producen en el ambiente acuático, consiguen que estos eventos sucedan siendo muchas veces dañinos tanto para animales como para el ser humano, además de que la alta concentración de estos microorganismos, algunos de los cuales producen toxinas, causa pérdidas económicas para la pesca.
En ese tenor, Soberanis Luna refirió que ya sesionó el Comité Intersectorial de Marea Roja de Yucatán, el cual se mantiene vigilante de cualquier aviso sobre una posible formación de este fenómeno, aunque refirió que también varias cooperativas pesqueras se mantienen al pendiente de ello.
La última vez que se tuvo registro de la presencia de marea roja en Yucatán fue en septiembre de 2015, cuando una mancha de unos 17 kilómetros de longitud causó estragos en varios puertos de la entidad. (ACOM)
