De acuerdo con datos recabados, poco antes de las 20 horas de anoche, decenas de soldados, federales, llegaron a la altura del kilómetro dos de dicho tramo estatal, donde ubica la estación de Igasamex, inactiva desde hace años.
La alerta se debió a una llamada anónima a las autoridades, que reportaba que en los últimos días se había notado movimiento sospechoso de maquinaria pesada en esos montes.
En el lugar de los hechos se pudo constatar que los delincuentes ya habían excavado alrededor de 60 metros de largo por dos de ancho y dos de profundidad, con la intención de alcanzar las tuberías de Pemex que ya no están en servicio.
Para cuando el Ejército y demás oficiales llegaron al lugar, los responsables ya habían escapado, por lo que no hubo detenidos.
Incluso fue necesaria una grúa particular para subir la retroexcavadora a la cama de un tráiler para que, de esta forma, inicien las investigaciones correspondientes.
Aunque los castrenses dijeron a los medios de comunicación que no se acercaran mucho "ya que se había reportado una fuga en una de las tuberías", la verdad no tardó en salir a la luz, toda vez que dichos ductos están desde en desuso desde hace tiempo. (ACOM)