Según la familia del joven, éste murió en circunstancias extrañas y cuestionaron la versión oficial, dada pie el Ayuntamiento de Oxkutzcab y la Fiscalía General del Estado (FGE), de que el fallecimiento fue un suicidio. A raíz de la muerte, hace dos semanas, se registraron protestas contra el Palacio Municipal de Oxkutzcab, la destrucción de tres patrullas valoradas en más de un millón de pesos y la detención de 12 involucrados en los desmanes.
El presidente de la Codhey declaró que el informe de lo sucedido debe presentarse en los próximos días y, si no responden las autoridades municipales y la Fiscalía, pedirán la aclaración correspondiente.
Especificó que ni la Fiscalía ni Oxkutzcab han respondido sobre las indagatorias de la Codhey.
Sin embargo, también dijo que varios municipios han mejorado las condiciones de sus cárceles públicas, como el caso de Ticul que ya las adapta a los requerimientos de derechos humanos; además de que el 22 y 23 de septiembre se realizará, junto con el Consejo para la Seguridad y la Paz, una capacitación a 23 municipios del sur de Yucatán en materia de seguridad pública y atención a cárceles municipales. (Paul Antonie Matos)