Sobre el tema, el especialista aseguró que la poca precipitación y la escasa actividad de sistemas frontales, a inicios de este 2020, serían factores a favor de que los montes se sequen antes de tiempo, dando paso a la presencia del fuego en pleno invierno.
"Se está esperando que sea una sequía entre fuerte y muy fuerte debido a que tenemos un déficit de lluvias desde el año pasado. Desde fines de diciembre y principios de enero no ha estado lloviendo o ha llovido poco. Los frentes fríos han llegado secos y eso va a acelerar el proceso de secamiento del monte y los terrenos baldíos, también, por lo tanto, estamos esperando que a fines de enero se presenten los primeros incendios", externó.
Explicó que la temporada de incendios normalmente inicia hacia finales de febrero y concluye con la llegada de las primeras lluvias, en mayo, aunque se espera que en esta ocasión, la temporada arranque de manera anticipada.
Remarcó que al no haber mayor humedad en el ambiente, la sequía se estaría adelantando, dando paso a la formación del fuego.
De hecho, dijo que se esperaba que la situación del tiempo se normalice a principios de este año, aunque hasta ahora no ha ocurrido.
"Esperábamos que enero fuera un mes con mucha actividad de frentes fríos, aunque la actividad sí hay, no logran llegar a la Península de Yucatán debido a sistemas anticiclónicos como el que hay ahora, un sistema anticiclónico está impidiendo que llegue un frente frío y esta semana, prácticamente, habrá calor durante el día, sin posibilidad de que caiga alguna lluvia, va provocando un procedo de secamiento del monte", apuntó.
Vázquez Montalvo recomendó a los ciudadanos tomar las medidas pertinentes para evitar afectaciones por la sequía y los incendios, evitando tirar basura en carreteras.
De igual forma, recomendó efectuar los llamados guardarrayas en tierras agrícolas, así como la limpieza de terrenos baldíos para evitar que el fuego los haga presa. (ACOM)