Los oferentes precisan que en un principio se generó una alta demanda de estos boletos, la cual ha ido disminuyendo, ante la contingencia por Covid-19, aunque hay personas que no dejan pasar la oportunidad de adquirir sus cachitos.
"Hace una semana se vendían bastante. Obviamente ha bajado la venta, por la situación viene menos gente, pero aún así, nos los piden mucho", dijo María Canto, quien atiende un puesto de lotería en el Centro Histórico de Mérida.
El costo de cada boleto es de 500 pesos, aunque parece que este precio no causa ningún problema a quienes los adquieren.
"Se trata de ayudar. No es cuestión de política ni nada y tampoco es para que me gane el avión", dijo una mujer que se identificó como Karina, quien adquirió un boleto en un puesto ubicado junto al Pasaje Picheta.
Cabe recordar que esta rifa no es precisamente del avión presidencial como premio principal, sino que el gobierno federal destinó una bolsa de 2 mil millones de pesos que se dividirá para 200 ganadores.
El fin último de esta rifa es para la generación de recursos suficientes para la adquisición de equipos de hospital. (ACOM)