José Lafontaine Hamui, delegado de la Profepa, mencionó que la inspección en el sitio determinó que se cercaron 5.2 hectáreas de terrenos ganados al mar, además de que se halló la siembra de palmas de coco y otras acciones sobre las que no se halló autorización.
En ese tenor, la dependencia procedió a realizar la clausura del sitio para evitar cualquier otra acción que afecte al ecosistema de costa.
La dependencia indicó que la colocación de dicho cerco, del que hasta ahora se desconoce el motivo por el cual fue instalado, estaría contraviniendo la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, que señala que para este tipo de actos se requiere de una autorización.
Dicha normativa, comprende sanciones de hasta 4 millones de pesos para quien incurra en algún hecho violatorio.
La Profepa señaló que se siguen las investigaciones para hallar al responsable de este hecho, al tiempo que se define si podría ordenarse el retiro del cercado. (Fuente: ACOM)