Debido a que el cierre del malecón se aplicó una cuadra antes de ingresar a esta sección, no hay circulación de vehículos o motocicletas y mucho menos de personas, pues solo se apreció a unos pocos vecinos deambular por el sitio.
La Comuna progreseña colocó rejas y cintas desde el inicio del malecón, indicando que no se puede acceder a la playa, aunque hubo quienes decidieron brincarlas, rápidamente fueron abordados por policías municipales quienes los exhortaron a retirarse.
En cuanto a los comercios, la ausencia de clientes o comensales fue el común denominador, si no fuera por una familia de paseantes que decidió aventurarse al malecón a pie, no habría más gente en el sitio.
"No sabíamos que estaba cerrado, pero solo venimos a comer algo", dijo una mujer mientras ocupaba una mesa en un restaurante.
Sin embargo, las mesas vacías de comensales y los anaqueles y exhibidores sin gente, generaron un ambiente de incertidumbre entre los empleados.
"Nos terminaron de dañar. Apenas nos estábamos recuperando", dijo un mesero que labora en un conocido restaurante mientras esperaba que llegaran comensales a este.
Como se informó, el gobierno estatal determinó cerrar la playa del malecón de Progreso hasta el próximo 17 de febrero, como medida para evitar aglomeraciones, y así disminuir los contagios de coronavirus.
Aunque el cierre no aplica para los comercios, parece que los paseantes decidieron ausentarse de estos, generando solo un ambiente de tristeza y preocupación. (ACOM)
