Y es que de acuerdo con lo dicho por el grupo autodenominado “Cantinas Históricas de Mérida” conformada por negocios como “El Cardenal”, “La Casita de Paja”, La negrita”, “El Porvenir”, “La Ruina” y “El Pico de Orizaba”, el cierre impuesto como medid para contener el crecimiento de contagios de Covid-19 significa la muerte de sus empresas, lo que dejará sin trabajo a más de 400 personas..
Said Farah, dueño de la cantina “El Cardenal” se quejó e la nula inclusión que negocios como el que suyo ha tenido en el plan de reactivación económica, por lo que han tenido que ser emprendedores para buscar estrategias que impidan el cierre de la fuente de empleo que mantiene.
Por su parte Eric Samson y Thomas Hogan, dueños de la cantina “La Negrita”, aseguraron que han tenido que invertir miles de pesos para adecuarse a las disposiciones sanitarias, por lo que consideran como una injusticia que de decrete el retiro de los permisos,
Los afectados entregaron a los reporteros que se encontraban en el lugar un documento donde aseguran que han sido solidarios de los esfuerzos del Gobierno para mitigar los efectos de la pandemia.
“Estamos comprometidos con una unión de los sectores públicos y privados para alcanzar una sociedad sana. Desde hace un año y varios meses como empresarios, hemos cumplido con nuestra responsabilidad colectiva hacia la sociedad al no abrir nuestros establecimientos y luego invertimos para cumplir con los requisitos, restricciones y pagos relacionados a los permisos de restaurantes” indica el boletín.
En el comunicado establecen que “la situación excepcional amerita un esfuerzo por parte del Gobierno para permitir que sigamos laborando y cumpliendo con los protocolos establecidos”.
“A la luz de estos elementos, solicitamos que nos consideren como sus aliados en la lucha contra la Pandemia y aceptar que nuestros protocolos evitan fiestas clandestinas sin control alguno. Es una necesidad social que regulamos en nuestros establecimientos con los protocolos establecidos por la SSY”, indica el documento.
Finalmente solicitaron que se reactive el permiso temporal como restaurante para que puedan operar con un aforo del 50 por ciento y con un cierre a las 22:00 horas
Posteriormente los dueños de las cantinas acudieron a la sede del poder ejecutivo donde entregaron un documento donde exponen sus demandas al poder ejecutivo.
