"No tiene la distancia para que se construya una granja. Hay mal olor, contaminación, moscos, ya se ha vuelto un problema de salud. El lugar tiene 4 años cerca del pueblo, pero desde hace 2 empezó a empeorar la situación", dijo Israel Euán.
Según la asociación "Kaanan Derechos Humanos", que apoya a los vecinos con este procedimiento, tampoco hubo una consulta de las autoridades antes de la instalación de la granja.
"No realizaron ninguna consulta previa para preguntarle a la comunidad si estaba de acuerdo o más bien, si aceptaba que se construya una granja porcícola tan cerca de su comunidad. Básicamente, la exigencia que están haciendo los compañeros, a través de su juicio, es el respeto a los derechos humanos que son inherentes a ellos como comunidad indígena", señaló Roberto Sánchez, representante de la agrupación.
Los vecinos de Sitilpech esperan que su amparo, presentado ante el Juzgado Primero de Distrito Federal, redunde en una suspensión provisional de la granja y que posteriormente haya un cese definitivo de operaciones. (ACOM)