Para la segunda etapa, del 26 de aquel mes hasta este martes, se abarcó 12 mil 720 hectáreas, en 278 zonas de la ciudad, con el objetivo de disminuir la molestia sanitaria que ocasionan los mosquitos ante la presencia de lluvias, en esta región de clima tropical, lo cual amerita acciones permanentes, de vigilancia y control de esta especie, transmisora de enfermedades como dengue, Zika y Chikungunya.
“No hemos bajado la guardia y, haciendo equipo con las autoridades municipales, trabajamos para que este beneficio llegue a un millón 250 mil habitantes”, comentó sobre estas labores, que emprendió personal de la SSY, a bordo de vehículos con maquinaria pesada y que, además de la capital, llegan a todo el estado, en dos horarios: a partir de las 5:00 horas y a las 18:30.
Durante este año, detalló, se han nebulizado 64 mil 793 hectáreas, rociado el interior de tres mil 712 hogares y, en el rubro de control larvario, revisado 323 mil 826 viviendas, a lo que se agregan las campañas de descacharrización, con las que se ha enviado, a rellenos sanitarios, cerca de 510 toneladas de potenciales sitios de reproducción del insecto, en Mérida y sus comisarías.
La educación en salud es participativa y se ha certificado 102 entornos libres de criaderos, entre dos albergues, cuatro cabildos, un par de Centros de Atención Múltiple (CAM), uno de Atención al Menor con Necesidades Especiales (Camne), una cancha deportiva, tres Casas de la Cultura, cuatro Centros de Desarrollo Comunitario y este mismo número de espacios diversos.
También, Centros de Salud y convenciones, cines, Sistemas para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) municipales, 33 escuelas, una estancia, dos hostales, 10 hoteles, una iglesia, tres Unidades Básicas de Rehabilitación (UBR) e igual cantidad del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Bienestar, mercados y oficinas de la Secretaría de Fomento Turístico (Sefotur).
Asimismo, el funcionario exhortó a la ciudadanía a mantener la guardia en alto, participar activamente en los esquemas de prevención y mantener sus hogares libres de objetos que acumulen agua; en este sentido, expresó que dichos avances han sido posibles porque la población está haciendo su parte.
Finalmente, recomendó a los habitantes de todo el territorio dejar abiertas sus ventanas cuando escuchen que los vehículos con equipos de fumigación circulen por sus calles, pues esto permitirá que el insecticida entre a sus casas, que quedarán más protegidas contra estos vectores.