Durante un encuentro con los medios de comunicación, Nicolás Andrés Dájer y Blanca Estrada Mora, hablaron del paupérrimo trabajo del Congreso del Estado y de la cuantiosa deuda por el caso de las luminarias que el hoy abanderado del PRIAN ocasionó de manera irresponsable “crecer la bola”, pues de 200 millones que hace 11 años debió cubrir el ayuntamiento por la cancelación del contrato ahora el monto asciende a más de 600 millones de pesos.
Ante los medios de comunicación, Andrés Dájer recordó que desde su primera administración como alcalde de Mérida, Renán Barrera, canceló de manera unilateral un contrato con la empresa AB&C Leasing de México para el arrendamiento de luminarias en la capital yucateca, lo que generó un proceso legal que perdió la comuna y endeudó a los meridanos con cientos de millones de pesos.
“El ayuntamiento lo sigue ocultando, no se considera deuda pública, porque en sus informes y balances hay un renglón que se llama pasivos circulantes, entonces, eso es un dato inexistente, te dan los informes de deuda pública y son unas cantidades elegantes y cómodas pero existe escondido bajo ese término contable esa deuda que hoy son más de 600 millones de pesos que por su puesto se trasladarán a la próxima autoridad municipal”, dijo.
Precisó que desde que presentaron una denuncia penal ante la Fiscalía Estatal Anticorrupción el caso se ha vuelto lento, porque de inicio, la autoridad no considera como afectados a los querellantes, ni les brinda la información del estatus de la investigación que presuntamente realizaría en torno al caso, por lo que continuarán con su lucha jurídica para que los involucrados en tal situación rindan cuentas ante las autoridades.
Cuestionados sobre si volverán a convocar a los abanderados a diferentes cargos de elección popular a firmar de nueva cuenta compromisos ante ese colectivo, tanto Estrada Mora, como Nicolás Andrés descartaron cualquier posibilidad de ello, principalmente porque en la contienda se encuentra Barrera Concha, quien en dos ocasiones ha signado acuerdos, los cuales no ha cumplido.
“Sería una falta de respeto a los candidatos participantes una convocatoria, sentarse y firmar un compromiso con alguien que ha firmado en dos ocasiones y no ha cumplido ninguno (…) Es una persona reprobada, sin compromiso, sin palabra y los hechos de corrupción, forma y manejos lo hemos exhibido”, apuntó Andrés Dájer.
Tal situación fue secundada por la activista Blanca Estrada, quien precisó que le darán un seguimiento puntual a las promesas de campaña de todos los candidatos en su proselitismo, pero no les montarán un escenario para su lucimiento.
“Organizar un evento para pedirles que nos firmen y demás tendríamos que invitar a un candidato que ya nos firmó dos veces y tenemos el papel…. Ni para ir al baño, entonces, estamos en la definición que esta vez no les vamos a armar un escenario para que nos vengan a firmar compromisos”, atajó.
En otros temas, Estrada Mora señaló que el propio Congreso del Estado violenta la ley que lo reglamentó al no realizar ejercicios de parlamento abierto para enrinquecer las propuestas presentadas por los propios legisladores.
“Lo que podemos decir de verdad con una sensación de impotencia es que el modelo de parlamento abierto, el Congreso que está terminando violador de su propia ley al que el marco jurídico le vale menos que un cacahuate, al que lo único que le importa son las órdenes que reciben y que de verdad (…) es una vergüenza tener diputados petronilos”, remató.
