En el nuevo inmueble, ubicado al norte de la capital yucateca, donde se atenderán temas migratorios, visas y otros documentos, el gobernador subrayó que el Consulado General de Estados Unidos en Mérida ha sido durante décadas un puente que conecta a nuestros pueblos, facilitando el intercambio cultural, económico y social.
Ante Justen Thomas, cónsul general de los Estados Unidos en Mérida, el Ejecutivo estatal reiteró que "en Yucatán, estamos comprometidos con el desarrollo sostenible, la seguridad, la educación y la mejora de la calidad de vida de las familias, cuyos objetivos son compartidos con el Gobierno de Estados Unidos".
En ese sentido, adelantó que "el fortalecimiento de esta relación nos permitirá continuar con programas como 'Cabecitas Blancas', que facilita la reunificación de familias yucatecas con sus seres queridos en Estados Unidos, uniendo corazones y fortaleciendo los lazos entre nuestras comunidades".
"Este nuevo consulado también será un espacio de oportunidades para nuestra gente. Será un lugar donde los yucatecos podrán acceder a servicios consulares de manera más eficiente, facilitando los trámites para quienes deseen visitar a sus familiares, estudiar o explorar oportunidades en Estados Unidos", aseveró.
Al reconocer la ejemplar seguridad de Yucatán, el embajador Ken Salazar destacó la importancia de impulsar el sur-sureste, generar prosperidad para sus habitantes y preservar la selva maya.
El nuevo espacio, edificado con una inversión de 200 millones de dólares sobre una superficie de 6 mil metros cuadrados y un terreno de 3 hectáreas, cuenta con oficinas, servicios públicos, estacionamiento techado y 12 ventanillas para atender a ciudadanos mexicanos y estadounidenses.
El consulado, que entrará en operaciones en la primavera de 2025, también refleja la cultura y el entorno local, desde las instalaciones artísticas hasta el diseño del propio edificio, inspirado en los yacimientos arqueológicos mayas.