En un comunicado, agregó que, bajo esa lógica, los jóvenes y niños, de entre seis y 18 años, son los más expuestos al constituir el mayor porcentaje de usuarios de smartphones y tabletas en nuestro país.
Recomendó la supervisión de los teléfonos móviles o tabletas a los menores y en general tener la precaución para evitar que los menores caigan en engaños y envío de fotos que después serán usadas en pornografía.
Detalló que los demás grupos de edad que utilizan smartphones y tabletas son los de18 a 34 años con 17 por ciento y de 25 a 34 con 19 por ciento.
Cada uno de estos sectores es víctima de delitos, estafas, fraudes, robos, delitos financieros como personas físicas o empresas, como usuarios de banca electrónica o al adquirir productos anunciados por internet (e-commerce o comercio electrónico) y otros delitos como amenazas, chantaje, difamación, entre otros. En el caso de los menores son más propensos a trata y pornografía infantil.
“Lo más grave es que somos nosotros quienes exponemos a los menores porque les damos esas tecnologías y nunca los vigilamos”, expresó.
Explicó que el ciberdelincuente está detrás de un teléfono, una computadora, una tableta y desde ahí comete delitos patrimoniales, contra el desarrollo psicosexual de las personas, de los niños, adolescentes, delitos financieros, usurpación de identidad, robo a empresas a través de fraudes internacionales, entre muchos otros.
Habló también de la venta ilegal en internet y de otros delitos como el grooming, sexting, cyberbulling, explotación sexual infantil y pornografía infantil.
Definió como delito cibernético todo aquel que utiliza las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC´s) como medio o fin para la consumación de un acto ilícito y que pueden ser procesados por querella o de oficio, tales como venta de armas, venta de drogas, trata de personas, pornografía infantil, corrupción de menores, abuso sexual, hacking, phishing, menor desaparecido, entre otros.
Por el lado de querella mencionó los delitos de acoso, amenazas, difamación, extorsión, fraudes a usuario de banca electrónica, comercio electrónico, fraude nigeriano, entre otros.
Señaló que los delitos que más se reportan son el fraude y extorsión con 36 por ciento, después delitos contra las personas 35, vulnerabilidad 22 y delitos contra niñas, niños y adolescentes 7 por ciento.