“Lo que pasó fue una broma privada, que yo empecé con cuatro amigos, que yo terminé”, aseguró en entrevista al salir de la Fiscalía.
Aseguró que otras personas lo publicaron como amenaza pública, y el mismo día intentó aclarar el asunto.
En una conversación de WhatsApp que se filtró a redes sociales virtuales, Yael N. anunciaba una presunta intención de llevar armas a la Facultad de Matemáticas para disparar. Dicha conversación provocó la alerta en los universitarios y se suspendieron las clases durante mediodía del lunes 7, hasta las 15 horas de ese mismo día.
Dijo que sí se han acercado directivos de la UADY a él, pero está enfocado a resolver la parte legal.
Aclaró que no acudió a las audiencias solicitadas por la Universidad para evitar ser detenido.
Ahora, busca resolver el problema y la parte administrativa con la Universidad.
“Como funciona Facebook y como funciona Internet, recibí amenazas públicas, privadas, de gente que me quería matar”, comentó.
“Pero uno que está metido en eso sabe cómo funciona, saca conclusiones y no sabe qué ocurrió”, sostuvo.
“Que juzguen su moral. Si exigen justicia, no es muy congruente exigir o matar a alguien, no tiene mucho sentido”, concluyó. (Paul Antonie Matos)