Según reportes de la autoridad municipal, sumaron unas 7 mil personas las que acudieron diariamente a esta representación, que presentó una de las obras más importantes de los Museos Vaticanos en Yucatán, gracias al acuerdo establecido del gobierno Vaticano con un grupo de empresarios mexicanos y que se cumplió con el proyecto la Capilla Sixtina en México.
De esta forma, la réplica de la Capilla Sixtina cierra su ciclo en Mérida, siendo la quinta ciudad en la que se presenta, ya que este proyecto se inició en la capital del país, posteriormente se presentó en Querétaro, Tuxtla Gutiérrez, Tapachula y finalmente Mérida, dentro del Programa Capital Americana de la Cultura que se desarrolló a lo largo de 2017 en la capital yucateca.
En opinión de muchos de los asistentes, esta obra es una verdadera maravilla, como lo refirió el estudiante universitario Eduardo Chi, de 19 años de edad, quien vino desde Chetumal al recorrido de esta obra.
“Es verdaderamente maravilloso ver las pinturas, entrar a un sitio tan emblemático para la cultura universal y que no está al alcance de todas las personas, porque es un museo que está en Roma y fue traído a Mérida”, expuso.
“Caminar y ver los detalles de estos frescos, admirar el trabajo de los pintores más renombrados del mundo, es verdaderamente una maravilla”, argumentó.
En opinión de la artista y periodista Ileana Menéndez, la reproducción de la Capilla Sixtina en verdaderamente para visitar no una, sino todas las veces posibles, porque se puede caminar, permanecer en el espacio con aire acondicionado y disfrutar de una obra de arte única en el mundo, traída a Mérida a través de estas empresas patrocinadoras.
“Es verdaderamente generoso poder admirar estas obras y advertir la belleza y la presencia mística en estas obras del renacimiento”, expuso.
De igual forma, Christian Rebolledo, estudiante de arquitectura, de 25 años de edad señaló, “Yo fui a Roma, hice horas en las filas y apenas pude permanecer en la Capilla, porque ahí son miles de personas las que acuden, entras en paquete a la Capilla, no hay explicación alguna, las personas están sujetas al mínimo espacio para permanecer y a los 10 minutos te sales por otra puerta, sin ver más que lo mínimo”.
“Fui a la presentación en Mérida con mi abuelita, porque ella nunca ha viajado a Europa, le conté lo que yo vi y fue muy distinta la experiencia, porque aquí no hicimos fila, pasamos casi de inmediato, disfrutamos el espacio, caminamos y tocamos las paredes”, sostuvo.
“Es muy distinto a lo que yo viví en Roma y ciertamente aquí se pudo admirar más la arquitectura, la estructura y muchos de los detalles pictóricos de estas obras que están consideradas entre las más vistas del mundo”, comentó. (Fuente: ACOM)