Este encuentro va más allá de la política, destacando los valores fundamentales de la amistad y la lealtad en la vida cotidiana y es una forma de agradecer la confianza y cariño que siempre lo han acompañado.
El desayuno, que se ha convertido en una tradición, celebró historias de amistad que perduran por décadas, algunas incluso con más de 30 o 40 años de compañerismo. El Senador compartió momentos especiales con amigos de distintos ámbitos de su vida, recordando anécdotas que reflejan la solidez de las relaciones personales.
"La amistad es un lazo que va más allá de la política. En estos encuentros anuales, celebramos no solo los logros y desafíos, sino la fortaleza de nuestras amistades. Agradezco a todos los presentes por su apoyo continuo y sé que estamos listos, todos juntos, para lo que está por venir", expresó el legislador.
Acompañado de su esposa, María Elena Grados Castellanos, el senador Ramírez Marín pronunció un emotivo discurso en el que resaltó la importancia de que cientos de amigos se dieran cita para compartir este momento especial. Subrayó los valores fundamentales de la amistad, que trascienden fronteras y cargos públicos.
Uno de los aspectos distintivos del evento es la dinámica "de traje", donde los invitados aportan alimentos, ya sea preparados por ellos mismos o adquiridos, creando un ambiente de fraternidad y camaradería alrededor de la mesa.
La reunión se llenó de los aromas y sabores de los guisos que cada invitado llevó, desde tortas de cochinita y lechón, chilaquiles rojos y verdes, huevo, ceviche, atole nuevo y una gran variedad de postres y panes, por mencionar algunos, formaron parte del menú.
Los asistentes expresaron su respaldo total al senador, manifestando que lo seguirán acompañando a lo largo de su trayectoria política. Lo calificaron como un político comprometido con Yucatán y su gente, destacando su dedicación a los valores que fortalecen la convivencia y el sentido de comunidad en la región.
