Por tal motivo, los inconformes acudieron al Congreso del Estado para pedir la intervención de los diputados locales, pues están cansados de la campaña de terror que Palma Santos ha emprendido a quien se atreva a cuestionar su autoridad.
Según Víctor Manuel Tut Xequé, de la comisaría de Tixcacaltuyub, Palma Santos envió a sus policías a golpearlo salvajemente.
Los uniformados lo acusaron de estar ingiriendo bebidas alcohólicas en la vía pública cuando en realidad estaba en las afueras de su casa donde se encontraba laborando el fin de semana.
Tras el “levantón”, lo trasladaron a la cárcel municipal, donde lo mantuvieron por más de 24 horas, robándoles el teléfono celular y otros objetos.
El afectado fue acompañado por habitantes de esa comisaría, quienes denunciaron públicamente al alcalde Sansón Israel Palma Santos de destituir a las autoridades que democráticamente ellos eligieron, de marginarlos con la falta de apoyos y de recursos, así como de enviar a sus policías a intimidar a los pobladores de ese lugar.