De acuerdo con un boletín emitido por la dependencia estatal, el menor se bañaba en el mar, en la zona del playón, cuando sus padres vieron que su hijo flotaba boca abajoo, por lo que su señor padre nadó hacia él, lo llevó a la orilla y gritó pidiendo ayuda.
En ese momento pasaba en rutina de vigilancia la patrulla 6435 de la SSP.
Los oficiales Fernando Mukul y Heyder Gustavo Baas, intentaron reanimar a Víctor Alejandro, pero no reaccionó así que de inmediato lo subieron a la patrulla y lo llevaron a la Unidad de Medicina Familiar del IMSS de Progreso.
Los médicos consiguieron estabilizarlo pero ante lo delicado del caso indicaron que debía de ser atendido en un hospital.
La ambulancia Y-34 de la SSP, al mando de la paramédico Kineret Govea, se hizo cargo del traslado al hospital del Issste en Susulá.
El menor permaneció ingresado durante una semana, tres días en cuidados intensivos.
“Hoy, cuando esos momentos de angustia son solo recuerdos, la familia Alcocer Canto, vecina de la comisaría de Opichén, Mérida, quiso externar su agradecimiento a los elementos de la Policía Estatal”, finaliza el comunicado.