En el Gallier Hall donde se efectuó el acto protocolario de la ratificación de hermanamiento de las ciudades, Barrera Concha y la alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, acordaron trabajar en conjunto para el fortalecimiento de los vínculos que tienen ambas ciudades, además que trabajarán en proyectos que tengan puntos de encuentro con un enfoque de multiculturalidad.
El presidente municipal aseguró que resulta grato afianzar la hermandad entre estas ciudades, que desde 1990 que se firmó la carta de hermanamiento, se ha trabajado en proyectos comunes e intercambio de experiencias que van desde la gastronomía, la cultura, la música, las fiestas populares, entre otras.
“Mérida y Nueva Orleans comparten mucho. Ambas son urbes multiculturales que en la diversidad han encontrado un mayor motivo de unión y desarrollo. A eso obedece nuestra presencia, agradeciendo todas las atenciones y facilidades que nos han otorgado para estar juntos nuevamente. Porque entre nuestras diferencias de idioma, costumbres y tradiciones, también están las múltiples coincidencias por el amor a la música y la reconocida gastronomía”, expresó.
Otra característica, abundó, que nos acerca es la alegría que distingue a nuestra población y que, en el caso de Nueva Orleans, se desborda en el Mardi Gras y en el de Mérida, en nuestro Carnaval, ambas festividades referentes en sus respectivas zonas de influencia.
“Hay en ambas ciudades mucho sentido de pertenencia y esto, a su vez, se refleja al exterior haciendo que los turistas nos busquen como lugares entrañables para disfrutar unas buenas vacaciones conociendo la cultura, conviviendo con la naturaleza, disfrutando la alegría de la música y dándole gusto al paladar con la reconocida gastronomía que nos distingue”, reiteró.
Señaló que tanto Mérida como Nueva Orleans son puntos atractivos para los visitantes, como la capital yucateca que su ubicación estratégica e infraestructura ofrece un amplio abanico de oportunidades para impulsar la competitividad y apuntalar el crecimiento económico.
Recordó que este impulso a la infraestructura comercial se da desde un nivel municipal y estatal, como el proyecto de ampliación y modernización del puerto de Progreso, en donde el Gobierno del Estado de Yucatán trabaja para aumentar el calado del puerto de altura para recibir embarcaciones de mayor tamaño considerando que la distancia entre Nueva Orleans y Progreso es de 300 millas náuticas.
“Esto abre aún más la puerta para estos intercambios comerciales y turísticos, pues por ejemplo actualmente llegan embarcaciones de 40 mil toneladas y con el nuevo proyecto será posible recibir buques de hasta 100 mil toneladas”, añadió.
Destacó que el hermanamiento es un modelo efectivo de cooperación y una evidencia de que la unión hace la fuerza y permite crecer juntos, que esta unión de esfuerzos y voluntades es necesario no sólo dentro del mundo globalizado, sino también para dejar atrás las consecuencias de la pandemia.
El mensaje de bienvenida y cierre de esta actividad estuvo a cargo de la alcaldesa de Nueva Orleans, quien agradeció a Mérida su voluntad de continuar con este proyecto que permite no sólo enriquecer las relaciones entre las ciudades, sino desarrollar proyectos que permitan que las economías locales encuentren nuevos mercados para desarrollarse.
Cabe recordar que el hermanamiento se consolidó en 1990, mientras que en la administración municipal de 2009 se formalizó la relación entre Mérida y Nueva Orleans, a fin de promover que se intensifiquen los esfuerzos entre ambas, el intercambio de experiencias y la ejecución de actividades comunes.