En el marco de las actividades con motivo del Centenario de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), así como del 50 aniversario de la Facultad de Psicología, se lleva a cabo el XVIII Coloquio de la Red de Programas de Posgrado de Calidad en Psicología, en el cual se realizó de manera virtual la conferencia “Cambios psicosociales durante la pandemia del Covid-19”.
Durante la charla, la especialista indicó que la pandemia causada por el coronavirus SARS-CoV-2, ha propiciado cambios en los hábitos y conductas sociales, en la manera de interactuar, en el estilo de vida de las personas y también ha provocado consecuencias psicológicas en la población.
En tal sentido, expuso varias recomendaciones de carácter psicológico tanto para la población general en el contexto de la pandemia que aún se vive.
Primero, entender que las reacciones emocionales como ansiedad, preocupación, desesperanza, incertidumbre e irritabilidad entran dentro de lo esperable en una situación de pandemia y que en general son transitorias.
Además, hay que mantenerse activo mentalmente con trabajo, lectura, música, actividades de ocio y físicamente mediante algún tipo de ejercicio o baile, pues constituyen unas excelentes estrategias para regular las emociones y el cuerpo.
“La situación que vivimos nos llevó a romper nuestras rutinas de forma abrupta y esto generó un sinfín de emociones negativas, para afrontarlo, debemos tratar de convertir nuestros temores en un miedo productivo, que nos ayude a normalizar la situación con prudencia y respeto hacia los que la afrontan de forma diferente”, afirmó.
Para ello, dijo, será necesario aprender a convivir con el virus y gestionar los miedos para alcanzar el “miedo productivo”, que no es más que el temor utilizado de una manera adaptativa que nos ayude a ser prudentes y adecuarnos a esta realidad.
“Hay que buscar la forma de recuperar rutinas y aprender a vivir con el Covid-19”, agregó.
Antes de finalizar, comentó que cada persona gestiona de forma diferente sus sentimientos y esta crisis en concreto, de modo que, si el nivel de las emociones negativas y sensaciones desagradables ocasionadas por el miedo al contagio o por el miedo a volver a estar confinados es muy alto, es preferible buscar ayuda profesional.