El manifestante, que además portaba una cartulina con la leyenda “¡Ladrón disfrazado de político! ¡A la cárcel!”, se encontraba encadenado de sus extremidades inferiores, se colocó por algunos minutos en la puerta del Palacio de Gobierno, lo que generó la atención de ciudadanos y visitantes.
Posteriormente, los inconformes cerraron la calle 61 por algunos minutos, para denunciar el mega fraude que fueron objeto, el cual según han informado rebasa los 500 millones de pesos, el cual hacen responsable a Caballero Durán, quien era socio de la familia Argáez López, dueños de la caja de ahorros.
Según los manifestantes, el fraude se orquestó desde 2012 cuando la entidad financiera cambió de razón social y pasó de ser 'Crecicuentas' a 'Hagamos más', pero los directivos les garantizaron la permanencia del capital e incluso prometieron mayores dividendos.
Recordaron que el problema detonó en 2013, cuando socios de Crecicuentas del municipio de Oxcutzcab comenzaron a externar quejas de que la empresa no quería darles sus ahorros, para febrero Crecicuentas despide a sus empleados y cierra sus puertas dejando a más de 500 socios sin noticias de su dinero.
En ese mismo año, los afectados acuden ante la Fiscalía General del Estado (FGE) a interponer la denuncia, también al Congreso de Yucatán, para pedir ayuda por la pérdida de sus ahorros, para marzo del 2013 sumaban al menos 200 quejas ante la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Para 2014 se documentaban más de 400 defraudados de Yucatán y se gesta un movimiento conocido como “Las Abuelas de la Plaza Grande” donde el total del monto defraudado ascendería a 200 millones de pesos.
Meses después, el Poder Judicial dictaminó la orden de reaprehensión en contra de los hermanos Jorge Alberto, Miguel Ángel y Claudia Rubí Argáez López, junto con su madre Lina Rubí López Conrado, como presuntos responsables del fraude de Crecicuentas, donde fungían como directivos de la Cooperativa de Fomento Regional.
Sin embargo, meses después fueron liberados y a pesar de que se regresó parte de sus recursos a algunos de los defraudados, sin embargo, cientos de los afectados recrudecieron sus protestas desde julio del presente año.