Aunque convocaron a las 10 de la mañana, los 30 músicos que participaron salieron hasta las 11 desde el Palacio de la Música, rumbo al Palacio Municipal de Mérida.
"Ruido, ruido, la música no es ruido, la música no es ruido", fueron algunas de las consignas durante el trayecto y su posicionamiento frente al Palacio Municipal, en la Plaza Grande.
Los motivos de la protesta fueron el cierre de múltiples bares y centros de entretenimiento en Mérida, debido a los problemas de contaminación auditiva que el gobierno municipal está actuando para reducir durante las noches.
RosMarcus, músico de reggae, dijo a Rompecabeza que se ha actuado en contra de los bares y centros de entretenimiento que tienen música en vivo. Entre las 21 horas y la medianoche se deben reducir a menos de 65 decibeles, según el Reglamento de Protección al Ambiente y Equilibrio Ecológico del ayuntamiento de Mérida. La ley indica que deben ser de 65-68 decibeles en espacios comerciales.
Bares cómo PK2, La Pulquerida y Delorean Santuario Sonoro han sido afectados por las clausuras temporales, tras inspecciones municipales el fin de semana pasado (Paul Matos)
