Armados con banderas del pueblo maya y una bocina para externar sus consignas, cerca de 50 cenoteros marcharon del Monumento a la Patria -en donde se instala el escenario para el concierto de Ricky Martin- hasta las puertas del hotel Fiesta Americana en compañía de activistas del grupo Indignación para manifestar su repudio al complejo operado por Kekén.
Los quejosos encabezados por Cristina Menéndez Muñoz, perteneciente al colectivo ya mencionado, lamentaron la actitud de los gobernantes, pues consideraron que las medidas tomadas en contra de la manifestación pacífica pretenden invizibilizar al pueblo maya y vender una falsa idea de paz, "no nos vamos a cansar de luchar por el agua, que es de todos nosotros", advirtieron.
Destacaron que el proyecto, que pretendía producir 45 mil cerdos anualmente, se encuentra desmantelado en la actualidad y son siete los juicios que siguen su curso en contra de Productos Alimentarios y Porcícolas (PAPO) y aseguraron que seguirán en pie de lucha en defensa de los cenotes de Yucatán, hasta las últimas consecuencias.