Y es que a decir de las activistas, la reclasificación de feminicidio en grado de tentativa a lesiones provocadas por violencia familiar que realizaron los jueces Jorge Enrique Edén Wynter García, Pablo Jesús Hernández Moreno y Didier Rolando Ramírez Canto, es una clara violación a los derechos de la víctima quien por poco es asesinada por su ex pareja quien en ese tiempo era practicante de artes marciales.
Mediante un extenso documento leído por Ligia Vera Gamboa, activista y catedrática de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) se plantea la difícil situación que viven las mujeres en el estado para alcanzar la justicia en la entidad, lo cual se ha visto en casos de violencia feminicida que sufrieron Emma Gabriela Molina Canto (+), Greta Martínez Corona y el de Andrea, una joven mujer que fue golpeada por más de una hora.
Vera Gamboa señaló que existe un marco legal en la entidad y a nivel nacional que no fue procurado por los magistrados, motivo por el cual deben ser separados de manera preventiva de sus cargos ante la posibilidad de que incluso el agresor de Andrea pueda salir de la cárcel.
Señaló que es urgente que tanto estado como federación fortalezcan la atención de los casos de violencia hacia las mujeres bajo perspectiva de género, pues en muchos casos hay vicios de origen en las indagatorias realizadas por la Policía Estatal Investigadora (PEI) que generan que los casos se caigan en los juzgados.
Reconoció que el gobierno actual ha hecho esfuerzos por mejorar el acceso de las mujeres a la justicia, sin embargo, consideró que el problema es de tal magnitud que no puede solucionarse “pasando pintura por encima”.
Finalmente, hizo un llamado todas las mujeres que sean víctimas de cualquier tipo de violencia denunciaron ante las autoridades y en caso de no ser escuchadas acudir con las organizaciones de la sociedad civil para ser asesoradas correctamente.
Durante la rueda de prensa estuvieron presentes también las Milagros Herrero Buchanan, Marcela Chan Chan, María Eugenia Núñez Zapata y Layda Rodríguez Torres, quienes se sumaron al llamado de frenar la violencia feminicida en Yucatán.