De acuerdo con datos proporcionados por la Japay, ese organismo público descentralizado atiende en promedio al día cerca de 80 reportes de fugas por distintos rumbos de la capital yucateca, en una ardua tarea para evitar la pérdida de miles de litros agua y mantener la calidad del servicio.
Se informó que a pesar de la cuarentena y las restricciones por la contingencia del coronavirus, unos 80 fontaneros, divididos en 25 cuadrillas, se la rifan todos los días en las calles, igual que policías, médicos, enfermeras, vigilantes y trabajadores de otros servicios públicos, entre otros, en una labor digna de reconocerse.
Para evitar cualquier contagio de coronavirus, el personal de la Japay trabaja con cubrebocas y sigue las recomendaciones de las autoridades, según se observó con los trabajadores que reparaban un registro en la calle 25 con 60 del fraccionamiento Herradura 1, de Ciudad Caucel.
Así, en una labor callada, casi imperceptible, los fontaneros laboran en tres turnos para que 360 mil usuarios de Mérida y la zona metropolitana cuenten con el servicio y tengan agua las 24 horas con solo abrir la llave, algo que en otras partes del país ya no es posible.
Cómo informamos, el Gobierno del Estado subsidiará el consumo de agua potable en los meses de abril y mayo, en apoyo a la economía de todos los hogares yucatecos, como parte de las medidas de ayuda que dispuso por la contingencia del coronavirus en la entidad.