Este fin de semana se realizó en Tecomatlán, Puebla, la sexta Espartaqueada Nacional de Matemáticas, concurso organizado por la Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios “Rafael Ramírez” (Fnerrr), el Centro Mexicano de Estudios Económicos y Sociales (Cemees) y Antorcha Magisterial (AM).
Este concurso, planteado e impulsado en principio por los doctores Elvio Accinelli y Leobardo Plata, pretende masificarse cada vez más y atraer a los estudiantes más pobres del país.
En un comunicado, Antorcha Campesina señala que tiene como objetivo contribuir a corregir la situación educativa de nuestro país, efecto del modelo económico nacional, pues las matemáticas son un elemento clave para el desarrollo económico de una nación.
“Sin la aplicación de éstas a la tecnología de los medios de producción de mercancías, no habría sido posible la enorme riqueza que actualmente produce el sistema: hoy la humanidad produce más riqueza que nunca antes en toda su historia gracias a que la economía ha alcanzado niveles de ciencia exacta, y en eso han contribuido enormemente las matemáticas como herramienta aplicada”, cita el comunicado.
Sin embargo, indica el texto que la economía se ha olvidado de analizar objetivamente la forma en la que el sistema actual cumple con esa función primordial y última; es decir, se olvidó de la crítica a las bases sociales del sistema, a la obligación social de una economía, que es el bienestar de todo el que trabaja en ella.
“Nuestra economía actualmente no se interesa en la justa distribución de la riqueza, pues el imperialismo norteamericano no permite que se afecten sus intereses económicos. Se ha acabado ya la libre competencia; la riqueza está centralizada en unas cuantas manos que mandan en los países y en el mundo entero”.
La característica que encumbra al fútbol y lo hace muy popular es, en gran medida, su simplicidad. El balompié, como tal, es tan lúdico que puede jugarse con cualquier tipo de instrumento que simule una pelota, como la lata de una bebida, señaló Sergio Varela Hernández, socioantropólogo del deporte de la UNAM.
Sentir tristeza, enojo, alegría o miedo, y expresarlos, puede resultar normal para cualquier persona; sin embargo, alrededor del 10 por ciento de la población mundial tiene dificultades para identificar y manifestar sus emociones.
Alguna vez, la escritora Erica Jong dijo que la maternidad es un estado similar a la locura y a lo divino, esto se debe a que “desde la fecundación e implantación del óvulo en la matriz se genera una cascada de cambios hormonales que promueven adaptaciones en el cerebro de la madre”, comentó Teresa Morales Guzmán, investigadora del Instituto de Neurobiología (INb) de la UNAM, campus Juriquilla.