Dicta la sabiduría popular que todos regresamos al lugar donde fuimos felices, por ello, no cae nada de raro que esta semana, marea política de la entidad se la lleven los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Movimiento Regeneración Nacional (Morena), a quienes por cuestiones de espacio nos referiremos como “PRImor”, luego que viejos priistas de dos episodios ocurridos el pasado lunes.
Y es que el senador Jorge Carlos Ramírez Marín, dio un manotazo de autoridad en las huestes tricolores y guindas, después que este lunes le organizó un mega evento a su homólogo Ricardo Monreal Ávila, lo cual no tendría mayor trascendencia sin temas como la reforma eléctrica y la sucesión del 24, tanto en Yucatán como en el país.
Lo ocurrido el viernes tuvo dos escenarios, uno privado y otro público , el primero fue desayuno en lo corto, donde estuvieron presentes dirigentes partidistas y senadores de diferentes partidos políticos, en la hacienda “San Antonio Cucul”, al Norte de la capital yucateca.
Los nombres de quienes estuvieron ahí está por demás revelarlos, fueron públicos, pues como en política, la nota no es quién estuvo, sino quién no asistió.
Así como lo lee querido lector, enmedio de la crema y nata de la política, tanto nacional como local, la ausencia de la senadora Verónica Camino Farjart, quien desairó a su coordinador en la cámara alta, fue aprovechada por el propio Ricardo Monreal, para considerar que en Mérida “tuvimos una muy mala candidata”.
Asistentes a dicho desayuno, aseguraron que en ningún momento se habló de una posible alianza entre PRI y Morena, con miras al 2024, empero, los aderezos están más que servidos para que ello se pueda dar.
Para jugar política en el nivel que usted quiera hay que tener canicas. Hasta el momento, las únicas con las que cuenta Monreal Ávila es su tono conciliador con las que se ha conducido en su aspiración de ser Presidente de la República.
Sin embargo, ello no le alcanzaría para colarse como un tercero en discordia, por lo que necesita un hit para estar dentro de las simpatías de Andrés Manuel López Obrador y su gran oportunidad es la reforma eléctrica impulsada por el tatich de Macuspana.
Por ello, el desayuno en la hacienda fifí tiene mucho más que una reunión de cuates, pues la presencia de senadores de “oposición” en la mesa, tienen puentes de diálogo para que en un futuro no muy lejano se pueda lograr una negociación donde la tónica sea “ganar-ganar”.
Así que no lo dude que el voto a favor de Raúl Paz Alonzo y de Jorge Carlos Ramírez Marín, de la reforma eléctrica de López Obrador sean moneda de cambio ante una virtual candidatura común tanto en Mérida como en Yucatán.
¡Al tiempo, diría mi abuelo!
Por lo pronto, el PRI como el elefante blanco que ahora es, reaccionó con lentitud ante tales amarres de forma ocurridos en Mérida y nombró al exgobernador Rolando Zapata Bello como el nuevo secretario de Alianzas Políticas y Agenda Ciudadana.
Al parecer, ni Morena, ni lo que queda del PRI acaban de entender que solo la unidad en sus proyectos los salvará de una derrota en el último de los bastiones azules en México.