No es reciente, pero ya más abierto, Víctor Caballero Durán, titular de Educación en el gabinete rolandista, en sus ratos libres ya le mete duro a las reuniones con militantes, adherentes y simpatizantes del tricolor.
No hace mucho, la semana pasada, el funcionario y militante se dio una vuelta en Motul donde gobierna el nada agradable alcalde de extracción panista, Vicente Euán Andueza, más conocido como “El Hielerito” o “El Vende Huesos” (por si no lo sabían, oferta retazos con hueso a 15 varos para los más jodidos a cambio, por supuesto, de potenciales votos, ya que en su “delirium tremens” considera la opción de reelegirse; válgame Dios) donde se reunió con decenas de tricolores y expuso el tema “El Camino a 2018”, con su nombre debajo.
Muy pocos dudarían de que Caballero Durán no esté en precampaña, sobre todo cuando sus homólogos del Revolucionario Institucional –Pablo Gamboa, el gordito Marín, el #Amigo Libo, Mauricio Sahuí y San Panchito Torres, entre los más reconocidos- ya avanzaron un buen trecho desde sus encargos como diputados federales (sólo en el caso de Sahuí, como secretario de Desarrollo Social) y como dice el refranero popular: “más vale tarde que nunca”.
En el último girón de noviembre y la primera quincena de diciembre, Víctor va a tirar la carne al asador para tratar de ganar más puntos entre la militancia priísta y conocer para cuánto le alcanza rumbo a las elecciones gubernamentales del año próximo. ¿Qué Víctor se carcome las uñas por llegar a la gubernatura? Muy dudoso. Interés tiene, por supuesto, pero también Rolando Zapata Bello conoce los alcances y limitaciones de su amigo en lides políticas de hace muchos años. Pero el preaspirante también tiene su corazoncito y, al menos, con parte de la estructura que ha formado en el PRI tiene para plantear condiciones en caso de que no sea el “elegido”.
En su futuro inmediato, Víctor Caballero tiene la vía por mayoría o plurinominal rumbo al Congreso del Estado que, al parecer, le sería más atractivo que una curul federal. Dicho de otra manera: Rolando, al salir del Ejecutivo, requiere de mayoría en el Legislativo y el encargado de tripular a la bancada del tricolor recaería en su antiguo compañero de lides grillescas. Así de sencillo. La otra opción es “Bob” Rodríguez Asaf, secretario General de Gobierno. El izamaleño sueña con la gubernatura, pero sólo sueña. Una curul federal le caería de perlas. También podría hacer un enroque con Caballero, ¿qué tal?
Y a todo esto, ¿ustedes ya escucharon hablar del factor Zací? Ah, caray, qué es el factor Zací.
Pues dicen los entendidos que este elemento es el que recientemente vino a calmar las agitadas aguas priístas, una vez que se armó el borlote con el “auto-destape” de Mauricio Sahuí Rivero (con Rolo Zapata, en una foto de archivo, alzándole la mano en señal de triunfo) y que, al parecer, no a muchos les cayó de buen talante.
Y el factor Zací proviene, naturalmente, de Valladolid. En efecto, no fue muy complicado dar con el misterio. Dicen los entendidos en el interior del propio tricolor y de Palacio de Gobierno que Liborio Vidal Aguilar, actual diputado federal, fue de los primeros que tomó con frialdad el “mensaje” de Sahuí y entre tanto “desmother” fue de los primeros en comunicarse con el funcionario estatal para externarle que, a su juicio, se había precipitado pero, no obstante, tenía todo su respeto.
Y es que en el interior del priísmo y de los altos mandos estatales, Liborio ha despejado dudas que sobre él existen, una de las principales, su amistad o cierta cercanía con Andrés Manuel López Obrador, el jefe máximo del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), quien sin duda, les guste o no a miles de personas (sean líderes de todo tipo en la escala social), es el candidato natural a vencer por la Presidencia de la República.
Y es que el factor Zací, como muchos ya le llaman a “Libo”, por supuesto que también tiene interés en la gubernatura de Yucatán pero a través de su instituto político y no traicionando al PRI en caso de que no sea el elegido para intentar relevar a Rolando Zapata Bello; al contrario, los tricolores parecen estar más calmados en este sentido y, por qué no, considerar al vallisoletano como una “opción B”, siempre que los otros aspirantes no logren ponerse de acuerdo o las encuestas internas no les sean favorables.
Hay un dato muy interesante que circula en las fuentes federales: José Antonio Meade, vigente titular de Hacienda, y uno de los que suenan como candidato del PRI a la Presidencia, sin ser militante natural de ese partido y que ha trabajado en las administraciones panistas de Vicente Fox y de Felipe Calderón, ya recibió buenos antecedentes de Liborio. Aunque quizá no se han tratado directamente, pero no se descarta que en breve haya algún acercamiento a través de intermediarios que laboran en Yucatán como delegados federales.
Algo parece quedar muy claro en el seno priísta: el factor de desunión no será Liborio Vidal; por el contrario, se sumará con toda su estructura del distrito uno al que sea electo pero, al mismo tiempo, se transforma en la “opción B” como el factor Zací. Cosas de la política. Se puede esperar de todo un poco.
En Acción Nacional, los movimientos todavía no son telúricos. Son ya cuatro los nombres que suenan más: Mauricio Vila (alcalde de Mérida), Renán Barrera (ex primer edil), Huacho Díaz Mena (ex abanderado gubernamental en 2012) y Cecilia Patrón Laviada (directora de Desarrollo Social del ayuntamiento meridano). Los primeros tres miran a la gubernatura; la última, a la alcaldía. Y párenle de contar.
PECHUGUITAS
¿Conocen ustedes a Olga Moguel? Bueno, si no les suena mucho el nombre, pronto comenzará a retumbarles en los oídos. La empresaria –su changarro lo pueden ubicar en la calle 59 entre 60 y 62 del Centro- y activista de derechos humanos tiene todo el objetivo de registrarse ante el IEPAC como candidata independiente para una diputación estatal. Para ello tiene como fecha límite el lunes de la semana próxima, de lo contrario, a volar. En caso de concretar su objetivo, pues a recolectar firmas a través de alguna fundación y canalizar billetes en equis institución bancaria como requisitos impuestos por el dizque árbitro electoral. Ella buscaría el distrito cuarto con sede en Mérida. Vaya, por fin una cara nueva.
Amiguitas y amiguitos, ya saben: sugerencias para que haya factores más optimistas en la contienda electoral, enviarlas a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. y/o Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.