El orden regresó a las sesiones del Congreso del Estado, pues sin previo aviso, la oficina de Comunicación Social impidió a los reporteros bajar al Pleno, bajo el argumento de que fue por “orden”, por lo que se prefirió que los fotógrafos se amontonaran en la escalinata de acceso, antes de proponer a los comunicadores una mejor estrategia para realizar su trabajo.
En las graderías del salón de plenos no hubo funcionarios de primer nivel, pues la mayoría de los titulares de las instituciones invitadas, prefirieron enviar representantes a la plenaria solemne, por lo que fue evidente el vacío en varios de los asientos destinados.
En un gesto de cortesía parlamentaria, el presidente de la Mesa Directiva, Enrique Castillo Ruz, permitió que la vicepresidenta de ese organismo, Rosa Adriana Díaz Lizama, dirigiera la plenaria de tal modo que toda la sesión fue encabezada por legisladoras.
La presidenta de la comisión especial para la entrega de ese reconocimiento que por primera vez se otorga en el marco del Día Internacional de la Mujer, Janice Escobedo Salazar, dijo que la fecha es de celebración por todo lo que se ha alcanzado, pero es también un día de reconocimiento a todas aquellas mujeres valientes que con sudor y esfuerzo, han heredaron un presente más equitativo y menos adverso.
La legisladora priista puntualizó que es tarea de todas y todos frenar la discriminación, la opresión, la misoginia, el machismo, la disparidad y la injusticia que obra sobre las mujeres.
“No es normal que te lastimen dentro de tu hogar, no es normal que abusen de ti, no está bien que recibas menos salario por realizar las mismas actividades y a veces hasta más que tu compañero de trabajo. No está bien que no te permitan postularte para ascender a ese puesto por ser mujer cuando tiene las mismas capacidades que los hombres. No está bien que soportes palabras hirientes, que te humillen y que logren hacerte creer que no sirves, que no vales y que estorbas”, dijo.
Por su parte, la artesana originaria del Xocchel, orgullosa de sus raíces mayas agradeció el reconocimiento a los legisladores yucatecos.
“Me siento muy orgullosa, por ser la primera mujer en recibirlo a pesar de que he recibido varios premios y reconocimientos entre ellos (Premio Nacional de Ciencias y Artes en la Ciudad de México en 2009), siento que esto es muy especial por ser el primero que otorga el Congreso del Estado y ser la primera en recibirlo”, finalizó.
Celsa Iuit Moo nació el 17 de abril de 1938 en Xocchel, Yucatán. Es pionera en su comunidad en la producción de artesanías, labor que ha realizado durante más de 68 años utilizando el soskil (nombre en maya que se da a la fibra natural obtenida de las pencas del henequén), en color natural.